El Hombre y La Vida

El ser humano y la vida.

La vida (1.) va por su cuenta. Desde un punto de vista práctico el alma tiene un destino y la vida otra razón de existencia.

        1. Según la Rae; primera definición de la palabra vida: fuerza o actividad esencial mediante la que obra el ser que la posee.

Muchas canciones lo han dicho, la vida me han prestado y tengo que devolverla. La vida es propiedad y responsabilidad de la Naturaleza amigo. Ni del alma ni del Ser. Y cuando digo Naturaleza me refiero a la primera acepción (2.)

    2. Según la Rae: Principio generador del desarrollo armónico y la plenitud de cada ser, en cuanto tal ser, siguiendo su propia e independiente evolución.

La vida es un envoltorio de energía: energía: vida; como el aura. Y esa energía-aura es auto-mega-inteligente; sabe mantener al cuerpo con vida, sabiendo que mantener la vida requiere una organización prácticamente indescriptible en su totalidad por la complejidad y magnitud, por mencionar algunas de sus funciones tenemos la constante e ininterrumpida circulación de la sangre, alimentando a todas las células que componen el cuerpo. El movimiento de los músculos interiores al respirar, en la boca, la garganta, el pecho y los órganos interiores hasta llegar a los pulmones. La decisión de los pulmones de realizar el intercambio de oxigeno a dióxido de carbono, que será expulsado del cuerpo mediante movimientos internos y externos que se auto-realizan comandados por la auto-inteligencia del cuerpo. El hambre como señal que identifica el cuerpo como necesidad de ser alimentado; la digestión que se realiza después de ingerir alimentos, todo el proceso complejo, ordenado y perfecto de digerir.

   3. Digerir: trasformar un tipo de energía (alimento) en otro tipo de energía capaz de ser asumida por el organismo. Primera acepción de la RAE

Esta auto-inteligencia es propiamente La Naturaleza y actúa de forma energética y con su sabiduría sobre todos los seres animados. La vida de cada uno de nosotros está sostenida directa, constante e ininterrumpidamente por la manos de la Naturaleza; hasta morir.

   4. Morir: separación del cuerpo y el alma. Segunda acepción del diccionario RAE.

Los indígenas tratan a la naturaleza como un ente superior, prácticamente como un Dios o Diosa. La madre naturaleza: La Pachamama dicen. La naturaleza es una inteligencia o energía que actúa e interactúa en nuestra vida.
-Sí, pero no somos seres únicamente Naturales.
-Exacto. Esto es evidente en el instinto de procreación. No es el ser humano quién decide procrear, es la energía auto-inteligente de la naturaleza, que actúa sobre todos los seres vivientes del planeta encomendándonos la misión, entre otras, de perpetuar la especie y la vida. Pero este es un objetivo de la Naturaleza, que se cumple a través nuestro. Tenemos cierto control sobre la energía sexual, pero a su vez, es muy claro que en estado de alta intensidad sexual, esa energía se auto-gobierna y busca la procreación.
Imagínate al ser humano, sometido entre otras a la potencia de la energía de la Naturaleza, actuando desde adentro y desde afuera con diferentes tipos de energía, entre ellas la de la procreación. Y por otro lado y en una escala diferente el Alma.

   5. Alma: sustancia espiritual e inmortal de los seres humanos, en algunas religiones y culturas. Segunda acepción.

El alma contiene otro objetivo de realización. Ligada a la naturaleza aunque independiente. El alma se sirve de la naturaleza para realizarse, éste es el carácter de su relación. En el mundo inmortal del alma, no existe el interés en la procreación. El alma no se procrea porque no desaparece.
El cuerpo como un puente donde se unen la naturaleza y el alma. Si un alma quiere oler una flor, respirar el aire después de la lluvia o nadar, necesita de la naturaleza. Es hermoso comprobar que aunque la Naturaleza nos use para sus fines pro-creativos, entre otros, una vez que estamos dentro de esas energías haciendo lo que esas energías nos proponen, una de sus consecuencias sea la llegada de otra alma al planeta. Quiere decir que en ese encuentro Natural, el alma también participa. También se escucha su voz susurrando detrás de ese acto, coinciden ambos intereses y/o destinos, el natural y el espiritual. A continuación la Naturaleza despierta en nosotros otros instintos Naturales auto-conscientes de protección y paternidad. Establece algunas garantías sobre la supervivencia de esa criatura recién nacida. Y hasta aquí nada hemos dicho acerca del amor. Porque el amor no es una capacidad propiamente Natural sino espiritual. No es imprescindible vivir con amor.
En este contexto reflexiona acerca de las numerosas y conocidas violaciones que se producen en países en estado de guerra. Allí donde la muerte encuentra muchas vidas, también la vida busca realizarse con una intensidad brutal. La violación en estos sitios es un impulso instintivo Natural, que actúa con tal potencia, equiparable a la de la propia naturaleza defendiendo la vida. La multiplicación de la vida por la vida misma.
Independientemente de la violación en sí, lo mismo sucede con las grandes proliferaciones de prostitutas en los países en guerra. La naturaleza lleva a cabo su auto equilibrio sí o sí. El problema es humano, porque la naturaleza actúa con la misma brutalidad y desesperación como el acto que intenta destruirla. Desde aquí podemos alcanzar aquel pensamiento que explica que las grandes tormentas, terremotos, huracanes, maremotos, glaciaciones, calentamientos, etc. sólo sean actos de la inteligencia: Naturaleza auto-equilibrando la balanza.